Yo acudí a Ana porque, aunque estaba acostumbrada a hablar en público, me sentía muy insegura de ponerme delante de una cámara a grabarme. Me daba la sensación de frialdad y no me atrevía. Ana me ayudó a hacer varios ejercicios para relajarme antes de ponerme a grabar, me dió ideas para enfocarme al público al que quería hablar, me enseñó a estructurar mis ideas y explicarlas de manera directa y sencilla.
Ahora, me he lanzado a hacer vídeos para mis formaciones y directos en redes y estoy mucho más segura y el feedback que recibo es muy bueno, así que estoy súper feliz con sus sesiones. Gracias por ayudarme a quitarme mis vergüenzas.